FRASES QUE NO DECIR A LOS NINOS.

10 frases que dices a los niños y los afectarán cuando sean adultos

Las palabras mal dichas pueden herir tanto o más que un golpe físico o una enfermedad, por eso es muy importante que cuando hablemos, sepamos hacerlo con tacto para no afectar a quienes nos rodean.

Ahora bien, ¿se imaginan la importancia que tienen las palabras para el desarrollo mental y personal de nuestros niños? Incluso hay muchos adultos que tienen vacíos o problemas en sus vidas a causa de las frases mal dichas que sus padres -muy seguramente sin intención- alguna vez les dijeron.

Por eso mira estas expresiones que es mejor NO decir a nuestros pequeños, no querrás generarles un trauma posterior, ¿verdad?

1 “Tu hermano lo hizo mejor que tú”

Si cuando somos adultos nos molesta que nos comparen, ahora imaginen todo el impacto que esta frase puede tener en un pequeño que está aprendiendo sobre la vida.

Decir estas palabras puede generar en el niño un sentimiento de celos y competencia con el hermano, por eso trata de omitir esta expresión. 

2 “Si sigues comiendo así, te vas a engordar MÁS”

En esta frase no solo le estás diciendo gordo a tu hijo sino que también le estás causando una baja autoestima.

Si tu hijo abusa de la alimentación y por ello tiene problemas de sobrepeso, lo mejor es acudir a un especialista, pero evita decir este tipo de frases que le pueden traer secuelas para el resto de su vida. 

3 “¡No hagas eso que tú no sabes!” 

Si no dejas que lo haga, ¿cómo sabes que no sabe? Y si no sabe, pues ¡enséñale! Pero trata de no decirle esto porque le generará una serie de inseguridades en las que él pensará que no es capaz de cumplir determinados objetivos en la vida.

4 “Ay, tú solo me generas problemas” 

Cuando decimos esta frase no sabemos el gran daño que le estamos causando a los sentimientos de nuestros pequeños.

Al escuchar esto, los niños sienten que sus padres no los quieren o que ellos son un estorbo, lo que les genera una sensación de desamor y tristeza que en un futuro les puede ocasionar miedo al rechazo.

5 “No preguntes tanto, no molestes” 

Los niños, sobre todo los más pequeños, tienen una etapa en la que preguntan por todo, ¡y es normal! Porque están creciendo y aprendiendo y para ellos todo es nuevo, ¿quién no quisiera saber el por qué de las cosas?

Y cuando esto pasa, muchos padres pierden la paciencia emitiendo este tipo de frases que hace sentir a los niños como una molestia y los pone a pensar que es mejor no acercarse a ellos debido a que no tienen tiempo para escucharlos.

6 “No llores que los hombres no lloran” 

Cuando decimos esta frase estamos generando un caparazón de fuerza y la idea de unhombre indestructible a nuestros hijos.

Aunque en un principio este método puede ser bueno para evitar que les hagan daño, también tiende a ser muy perjudicial porque les genera un sentimiento reprimido al no poder expresar abiertamente lo que sienten. 

7 “¿Por qué eres tan desordenado?”

Muchas veces esta frase en vez de hacer que el niño aprenda a organizar sus cosas, genera que los pequeños piensen que uno de sus defectos es ser desordenado.

Por eso lo mejor es enseñarle al niño a organizar sus implementos y así cuando sea adulto no va a pensar que una de sus debilidades es la falta de orden. 

8 “Si sigues así, no llegarás a ningún lado” 

Decir esta expresión le generará inseguridad y temor al niño, pues le harás pensar que él no es capaz de avanzar.

Y esto afectará su etapa adulta en la capacidad de enfrentar retos y afianzar su personalidad y autoestima. 

9 “Hija, ¿cuándo vas a aprender que eso NO se hace?”

Cuando dices de esta forma que tu hijo o hija no ha aprendido a hacer alguna actividad, le generas un sentimiento de tristeza.

De esta manera en un futuro, él va a pensar que no es capaz de hacer algunas cosas porque no sabe cómo hacerlas. 

10 Apenas llegue tu papá, le voy a decir lo que hiciste 

Las amenazas son muy empleadas como una forma para atemorizar a los demás, por eso cuando decimos este tipo de palabras a los niños, les generamos temor.

Pero no es solo esto, sino también el miedo que le empieza a tener el pequeño a su padre, lo que genera falta de confianza y causa problemas a futuro.