domingo, 21 de febrero de 2016

AMOR EN LA LATA DE LECHE







Dos hermanitos en puros harapos, uno de cinco años y el otro de diez, iban pidiendo un poco de comida por las casas de la calle que rodea la colina. Estaban hambrientos: ” vaya a trabajar y no molesten “, se oia detras de la puerta; ” aqui no hay nada, pordiosero… “, decia otro… Las multiples tentativas frustradas entristecian a los niños…
Por fin, una señora muy atenta les dijo: “Voy a ver si tengo algo para ustedes… ¡ Pobrecitos !”
Y volvio con una lata de leche.
¡ Que fiesta ! Ambos se sentaron en la acera.
El mas pequeño le dijo al de diez años: ” tu eres el mayor, toma primero…y lo miraba con sus dientes blancos, con la boca medio abierta, relamiendose “.
Yo contemplaba la escena como tonto… ¡ Si vieran al mayor mirando de reojo al pequeñito… !
Se lleva la lata a la boca y, haciendo de cuenta que bebia, apretaba los labios fuertemente para que no le entre ni una sola gota de leche.
Despues, extendiendole la lata, decia al hermano:
” Ahora es tu turno. Solo un poquito. “
Y el hermanito, dando un trago exclamaba: “¡ Esta sabrosa !”
” Ahora yo “, dice el mayor. Y llevandose a la boca la latita, ya medio vacia, no bebia nada.
” Ahora tu “, ” Ahora yo “, “Ahora tu “, ” Ahora yo “…
Y, despues de tres, cuatro, cinco o seis tragos, el menorcito, de cabello ondulado, barrigudito, con la camisa afuera, se acababa toda la leche… el solito.
Esos ” ahora tu “, ” ahora yo ” me llenaron los ojos de lagrimas…
Y entonces, sucedio algo que me parecio extraordinario.
El mayor comenzo a cantar, a danzar, a jugar futbol con la lata vacia de leche.
Estaba radiante, con el estomago vacio, pero con el corazón rebosante de alegria.
Brincaba con la naturalidad de quien no hace nada extraordinario, o aun mejor, con la naturalidad de quien está habituado a hacer cosas extraordinarias sin darles la mayor importancia.
De aquel muchacho podemos aprender una gran leccion: ” Quien da es mas feliz que quien recibe. “
Es asi que debemos amar. Sacrificandonos con tanta naturalidad, con tal elegancia, con tal discrecion, que los demas ni siquiera puedan agradecernos el servicio que les prestamos.”
¿Cómo podrias hoy encontrar un poco de esta ” felicidad ” y hacer la vida de alguien mejor, con más ” gusto de ser vivida “?
¡ Adelante, levantate y haz lo que sea necesario !
Cerca de nosotros puede haber un amigo que necesita de nuestro hombro, de nuestro consuelo y, quiza aun mas, de un poco de nuestra paz…
Dios te llene de sus bendiciones siempre.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Entradas populares